lunes, 8 de octubre de 2012

Sin querer saber.

Y si es cierto que has dejado de quererme...
yo te pido,
¡por favor,
no me lo digas!
Necesito por hoy
y todavía
navegar
inocente en tus mentiras...
Dormiré sonriendo
y muy tranquila.
Me despertaré
bien temprano en la mañana.
Y volveré a hacerme a la mar,
te lo prometo...
Pero esta vez...
sin atisbo de protesta o resistencia
naufragaré por voluntad y sin reservas
en la profunda inmensidad de tu abandono...

No hay comentarios:

Publicar un comentario